Al final aprendes que entregarte a todo el mundo tiene un precio si al final no hay nada de vuelta. Que ya fue suficiente.
Dicen que cuando alguien tiene ilusión y ganas de algo saca tiempo de donde haga falta, yo no diría que saca, eso sale solo, se convierte en prioridad y todo lo demás no importa en absoluto.
Mover cielo y tierra por ti me habría sabido a poco. Una pena que este sentimiento jamás se convirtió en recíproco y eso nos ha quemado por completo.
Se acabó.
He abierto los ojos y ya no hay vuelta atrás, ya no hay segundas oportunidades.
Cuando has visto la realidad tal y como es no necesitas nada mas que a ti mismo y mucho tiempo para reflexionar, crecer como persona y quererte mas que nadie.
Me necesito en grandes dosis y con un café doble para este Lunes, por favor.